Tienes razón, tengo que dejar de aferrarme al pasado si ese pasado ya no tiene sentido para mí. ¿Para qué mantener la posibilidad de que haya un contacto futuro cuando esa puerta semi abierta solo me molesta y cuando ese posible retorno ni lo deseo ni lo espero? Seguir teniéndola ahí es solo alimentar los mismos sinsentidos de siempre. Tanto en mi cabeza como en la cabeza de les demás. Así que ya está. Borrades de mi Facebook. Borrades de mi móvil. Borrades de mi presente.
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24 noviembre 2012
20 noviembre 2012
Violencias en el Día de la Memoria Trans*
Hoy 20 de noviembre en el mundo se celebran multitud de actividades para recordar a todas las personas trans* que han muerto por culpa de las agresiones basadas en la transfobia, el cissexismo y sus primos cercanos, la homofobia, el machismo y demás. Las personas trans* seguimos sufriendo todo tipo de asaltos a nuestros cuerpos, nuestras mentes, nuestras propiedades, nuestras identidades, nuestros entornos, nuestros derechos... Las muertes trans* no son más que la punta del iceberg de las demás violencias (física, emocional, verbal, material, estructural...) que vivimos. Violencias que provienen de todos los ámbitos en los que nos movemos: nuestras familias, nuestres amigues, nuestres conocides, les individues que nos cruzamos de forma casual a lo largo de la vida, la policía, las instituciones, la legislación, las estructuras sociales, políticas, económicas, los estados...
En un día como hoy no puedo evitar sentir dolor, rabia y tristeza al ver que hasta los puntos más básicos de mi identidad trans* me son negados de forma consecuente hasta por las personas que tengo más cerca. Que se dirijan a mí por mi antiguo nombre, por mucho que figure en mi DNI, lo vivo como una agresión. Sobre todo cuando sucede en un día como hoy y por alguien que sabe que es tal día y que yo soy trans*. Lo mismo que el que hablen de mí con pronombres y terminaciones femeninas. U oír como alguien se refiere a mí como "mujer", "chica", "señora" o similar. Y percibir el sexismo que me trata como mujer cisgénero y me intenta subyugar a una posición inferior. Por no hablar de tener que sentir esas miradas escrutadoras buscando en mi torso la señal indicadora de mi género. O ser sometide a preguntas completamente inaceptables por cualquier individue que le venga en gana, que van desde el aspecto de mis genitales hasta el motivo por el que todavía no he decidido quedarme embarazade.
Hablo con mis amigues cisgénero y de cada dos frases una contiene algo que muestra una falta de respeto a mi identidad.
Hablo con el resto del mundo y cada frase contiene un asalto a mi identidad.
Escucho lo que se dice que no va sobre mí en este planeta y cada media frase está llena de presunciones sobre el género, la sexualidad, la identidad, la forma de vida y de relacionarse, la etnicidad y demás, que hacen que mi vida sea completamente invisibilizada y borrada.
Estoy harte de tener que soportar golpes. Físicos. Verbales. Psíquicos. De tener que corregir a la gente. De sentir que no puedo decirle a mis amigues una vez más que sus errores me duelen, porque soy yo quien tiene que ser comprensive ya que elles hacen lo que pueden. De no poder mandar a la mierda a mi jefe cada vez que me llama "muchacha" o me trata como si fuera imbécil solo porque el muy gilipollas me lee como mujer. De no poder pegarle una patada en la boca al conferenciante de turno que cuenta, como me ha pasado hoy, que las mujeres son tal y él como hombre es cual, y por supuesto cual es mejor que tal...
Estoy hasta mi coño-polla de oír basura y ver que lo único que avanza es que ahora hay días como este, Día de la Memoria Trans*, en el que las personas trans*, y solo nosotres, nos juntamos a recordar con velas, canciones y discursos a nuestres caídes en las incontables batallas de esta guerra infinita contra el cissexismo y la transfobia. Es hora de reaccionar. La violencia que vivimos cada día solo merece una respuesta: mayor violencia.
14 noviembre 2012
Si estás igual solo que acompañado
Ya me he cansado. Si estás igual solo que acompañado, evidentemente no hay un motivo para dedicarle más tiempo a intentar hacer planes contigo, a intentar crear momentos de ocio compartidos. Si estás incluso mejor solo que acompañado, entonces ni siquiera hay un motivo para vernos. ¿Para qué quiero yo invadir tu soledad con mi presencia y mis palabras si tú te sientes mejor sin mí? No hace falta que malgastemos el tiempo de este modo. Si por tu parte no hay ninguna muestra de interés, o más bien, si lo que sucede es que no solo no hay muestras sino que tampoco hay ningún interés, entonces es mejor que estés solo. Tanto por ti como por mí.
08 noviembre 2012
Amor unidireccional, recíproco o multidireccional
El idioma que hablamos construye y determina de manera casi imperceptible la forma en la que vemos el mundo. Ese cristal a través del que he recibido muchos de los conceptos con los que he crecido, el español, es un filtro que en muchas ocasiones no me ha dejado ver más allá de mis narices. Un ejemplo claro. O yo me equivoco o el concepto amor en español no dice nada acerca del número de personas que deben poseer ese sentimiento. No se menciona pues si es algo unidireccional o si es necesaria una reciprocidad para que se dé semejante sentimiento. Así, si tú sientes algo intenso por alguien y ese alguien no siente nada por ti, en español a menudo dirías que quieres o amas a esa persona. Si dos individues desarrollan ese mismo sentimiento intenso de forma recíproca, seguimos hablando de querer o amar. Y si un grupo comparte ese mismo sentimiento hacia el grupo pero no hacia todes y cada une de les individues de ese grupo, o no en el mismo modo, seguimos hablando de amar. Amor pues en español es un concepto que incluye algo unidireccional, recíproco y multidireccional. No tenemos palabras diferentes para nombrar las diferentes situaciones, y eso nos hace confundirlas y entender que son lo mismo.
Esta simplicidad conceptual del español en cuanto a este sentimiento ha creado en mi cabeza una forma de ver el mundo de la que no era consciente. Incluso cuando he aprendido otros idiomas que disponen de varios vocablos para referirse y diferenciar estas ideas, durante mucho tiempo no había sido capaz de saltarme mi propio filtro y dejar de hacer esos términos como sinónimos o quasi-sinónimos cuando en realidad no lo son. Y eso es un problema, porque afecta sin duda a mi manera de vivir esos sentimientos. Y a las expectativas que tengo sobre ellos. Y ahora que por fin despierto a otras realidades, veo que para mí el "verdadero" amor, ese del que yo he ido hablando, no puede ser unidireccional, porque el amor, como todo lo demás, no es, sino que se construye en un diálogo, se hace.