Verdadera histeria a la hora de elegir

Aquí estamos, después de que hace unos días nos dijeran que no, con la posibilidad de tomar el coche de los padres de K prestado para irnos a algún sitio de vacaciones unos días a que nos dé el aire, con un poco de suerte menos fresco, y no sabemos qué decidir, si hacerlo o no, ni a dónde ir. ¡Antes lo teníamos claro y se nos estropeó y ahora no sabemos si hacerlo! La malísima economía que tenemos en el momento nos dice que no es responsable irse de viaje. Sin embargo, con la posibilidad del coche delante, quedarnos es tonto. Además, no tenemos ni trabajo ni estudios ni citas ni nada en los días que podemos tener el coche...

Pero... ¿y no sería mejor irse de charter a una isla griega o española en el Mediterráneo? Los viajes ahora están realmente tirados de precio si lo compras para el mismo día o para el día siguiente. Pero, ¿y cuánto dinero necesitamos allí? ¿Y qué cosas se pueden hacer en esos sitios de playa para turistas alejados de todo a los que te llevan? ¿Y no deberíamos entonces alquilar un coche allí? Pero alquilar un coche teniendo aquí la posibilidad de uno gratis es estúpido... ¡Qué agobio de decisiones!

Vamos, que al final nos ha dejado el coche esta tarde y aquí seguimos sin saber qué hacer. ¡Es patético! Un problema de lujo creado por la falta de decisión y de economía. ¡Qué contradicción!