Llevo dos días con un pedazo de catarro increíble y creo que todo porque el otro día al volver mi hermanito de Irlanda se le ocurrió darme dos besos y luego decir "¡Ah, sí! Tengo catarro". Si me lo hubiera dicho unos segundos antes probablemente me hubiera librado de esta tortura de noches sin poder respirar nada por la nariz... y de días como si me hubieran dado de palos...
Gesundheit!
ResponderEliminar¡Quejica!
ResponderEliminarPor cierto, K, el traductor se niega a decirme el significado de tu comentario.
Hola R. Es que la palabra no es danesa. Es una palabra alemana que significa salud que usan los americanos (y los alemanes) para decir "¡Jesús!" o "¡Salud!". Y no se por qué lo escribí en alemán aparte de para confundir a la gente.
ResponderEliminarSí, quejica... ¡De eso nada, majeta! Que todavía sigo aquí sin catarro pero con una tos bien hermosa que parece que se me ha quedado ya de compañía permanente para este invierno y a mis bronquios no les gusta tanta excitación.
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