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15 abril 2011

Otro 15 de abril

Otro año más, pero esta vez no voy a enviar el sms. ¿Para qué? Desde que metí la pata, ya hace muchos años de eso, nunca has querido volver a verme, por mucho que me hayas dicho que aceptabas mis disculpas, por mucho que me hayas escrito, me hayas llamado por teléfono, hayas estado entre mis contactos en Messenger o Facebook o lo que sea. O bien solo quieres recordarme que si la situación es así fui yo la responsable, o bien me tienes tanto miedo que no eres capaz de acercarte de nuevo ni para tomar un café o contestar a un email o sms. Así, desde entonces varias veces sin la menor explicación de repente has dejado de hablarme, o me has eliminado de tus contactos, o no has contestado a mis mensajes. Pero recuerda que también tú misma varias veces me has contactado, me has llamado, escrito o incluso sugerido vernos, aunque luego hayas desaparecido sin ningún motivo aparente... afirmando cada vez después que el motivo existía pero que no me lo ibas a dar.

Lo que está claro pues es que no te soy indiferente, igual que tú no lo eres para mí. Que no nos acordemos de la otra durante meses no significa que sintamos indiferencia. Que no tengamos contacto de forma esporádica y normal, como "amigas", "conocidas", "exs" (o lo que desees llamarlo) que viven en sitios muy distantes y tienen vidas muy diferentes, dice para mí más sobre tu miedo que sobre tu indiferencia. 

Tantas grandes palabras... ¿dónde está todo eso ahora? ¿También me vas a mentir diciendo que no significo nada en tu vida? ¿O vas a interpretar tu papel en este juego en el que mostrando indiferencia esperas llegar a sentirla algún día? ¿Acaso no te has preguntado si este año también te mandaré el sms? ¿Acaso no lo temes tanto como lo esperas con deseo? ¿Para qué tanto teatro? 

Ah, sí... Ya entiendo. Juego de poder. Pagar mis errores. Mostrar que no sentiste nada. Dejar claro que ahora no existo para ti. Mantener la ilusión de que solo has amado a personas aptas que lo merecen. Monogamia. Heterosexualidad. La vida perfecta en familia. Tradición. Tu pueblo. Dejar de soñar y aceptar tu "realidad". 

En tu vida "perfecta" no encajo yo. El pasado... que vive un presente que te da miedo. Sin el género adecuado. Sin heterosexualidad. Sin monogamia. Sin familia perfecta. Sin tradición. Sin patria. Sin dinero. Sin dejar mis sueños y sin esconderlo.

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