Me manda por email un abrazo un poco especial. Le escribo de vuelta diciendo que prefiero esperarme a dárselo en vivo. Me contesta que cree que no me voy a atrever y que probablemente hasta me dé vergüenza leer ese comentario. Su ingenuidad me deja perpleja. ¿No atreverme a darle un abrazo? ¿Ponerme roja por pensarlo? Si ella supiera las cosas que haría y las cosas que no me sonrojan cuando las pienso...23 abril 2010
Su ingenuidad me deja perpleja
Me manda por email un abrazo un poco especial. Le escribo de vuelta diciendo que prefiero esperarme a dárselo en vivo. Me contesta que cree que no me voy a atrever y que probablemente hasta me dé vergüenza leer ese comentario. Su ingenuidad me deja perpleja. ¿No atreverme a darle un abrazo? ¿Ponerme roja por pensarlo? Si ella supiera las cosas que haría y las cosas que no me sonrojan cuando las pienso...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
cargando lista de entradas relacionadas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si tienes problemas para dejar tu comentario, vuelve a pulsar en "Publicar". Casi siempre con insistir un par de veces funciona. Si no también puedes enviármelo a mi email en lilleskvat(a)gmail.com