02 junio 2011

No es mi tipo

Te dije ayer que no es mi tipo y tú me preguntaste que entonces qué me pasaba en algunas épocas con ella. No lo sé del todo. No lo entiendo todavía después de todos estos años.

Al principio solo la veía como mi amiga. Jamás me permití pensar en ella como en una mujer que me pudiera atraer. Y como te digo, tampoco era mi tipo. Mi amiga del alma. Ya está... Pero es que eso es mucho al menos dicho por mí. A mis amigos de verdad los quiero mucho, ya lo sabes tú también.

Luego esa noche charlando en vuestra casa y jugando empecé a sentir cosas. Cosas que eran demasiado evidentes. Su interés, mi interés. El flirteo. De repente mi amiga, ¿ya no era solo una amiga? No podía entenderlo pero tampoco podía negar a las tantas de la madrugada dándonos las buenas noches en la oscuridad esas terribles ganas de besarla. ¡A mi amiga!

Ahora todos estos años después me río de mi escándalo. Ahora que pienso que está claro que algunos amigos te hacen sentir deseo no dejo de parecerme ingenua por no haberlo visto venir antes. Pero entonces me llevé un buen susto. ¡Con ella eso no podía ser así!

Las ganas de besarla se pasaron, pero de tanto que hablábamos sobre nosotras y lo que sentíamos la una por la otra, de repente lo que sucedió es que mis sentimientos cambiaron, se volvieron enamoramiento. Y se lo dije a ella y ella te lo dijo a ti.

Como te dije ayer, ese enamoramiento también se pasó. Yo me fui lejos. Ella se quedó contigo. Y seguimos hablando más o menos como si no hubiera pasado nada y con el paso del tiempo ya no sentía lo mismo. Sin embargo, eso que sentí entonces ha cambiado mi visión sobre ella y también sobre mí. Entonces me hizo ver que por algunos de mis amigos siento algo que no sé distinguir de lo que siento por mis amantes. Y me ha hecho ver que ella es muy especial para mí en mi vida, y por tanto tratarla de esa forma especial.

Pero no, sigue sin ser lo que yo entendía entonces por mi tipo. No lo ha sido nunca. Aunque lo cierto es que cada vez tengo menos claro qué es ser el tipo de alguien... o al menos cuáles son mis tipos... Todavía no he encontrado a alguien que sea imposible que sea mi tipo.

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2 comentarios:

  1. El ser humano siempre es un ser en constante cambio. Nos aferramos a los preconceptos para tener la sensación de seguridad, para eludir el miedo a salirse de las convenciones del grupo. Nos imaginamos las personas como seres fijos porque es más fàcil manejarse así en lo social y porque evitamos algunos riesgos, situaciones embarazosas.Hay que tener en cuenta tambien que algunas cosas, como la influencia de las hormonas por ejemplo, se mueven más en el terreno del inconsciente y la fantasia se mueve, me imagino, en varios terrenos.No se puede controlar todo, aunque todos preferimos más bien lo contrario.Autosorprenderse no tiene nada de extraño aún cuando nos educan para evitar sorpresas.Besos.

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  2. Justamente, es la educación lo que nos hace reaccionar con sorpresa ante algo que es completamente natural y habitual. Besos.

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