22 septiembre 2011

Las reglas del divorcio en Dinamarca

Estaba mirando cómo son las reglas del divorcio en Dinamarca y sinceramente me escandalizo de las cosas que hay en la ley. Si te quieres casar, por supuesto, es gratis, pero si te quieres divorciar tienes que pagar 500 coronas de gastos de administración. Si te quieres casar, no tienes que justificar ni demostrar nada, solo tienes que aparecer y decir que quieres casarte. Si dos personas (y solo dos) están de acuerdo es suficiente. Por supuesto, esto no es así a la hora de divorciarte. No es suficiente con que quieras divorciarte. No es suficiente con que las dos personas estén de acuerdo. Tiene que haber un puñetero motivo y, lo que es peor, tiene que ser verificable. Si no, te fastidias y te esperas medio año o un año para poder divorciarte. 

Y lo que ya es de comedia trágica son los motivos que se pueden aludir para no tener que esperar ese tiempo:

  1. Infidelidad.
  2. Haber vivido 2 años en direcciones diferentes por problemas.
  3. Haber sufrido maltrato físico grave e intencionado.
  4. Bigamia.
  5. Secuestro de un hijo común al extranjero.

FASCINANTE. No sé qué me parece más estúpido: 

1. La infidelidad está definida como una relación sexual o algo semejante (deduzco que se trata de meter una polla en algún sitio, pero si no hay pollas entonces lo que sea que hagan esas personas que tienen sexo sin ellas) en los últimos dos años. El vejado tiene que haberlo sabido solo en los últimos seis meses y no puede haberlo perdonado. Pero lo que es más patético: la persona con la que se ha sido infiel debe firmar diciendo que ha tenido sexo con uno de los dos miembros de la pareja. Solo si todo esto se cumple, no es necesario esperar para divorciarse. 

Por supuesto, hay mil aspectos criticables en esta primera causa, desde el vocabulario hasta la moralina barata que hay detrás de todo el asunto. Esto está clarísimamente hecho por alguien que es sexual y que encima cree que el cuerpo de la pareja es una posesión y que el sexo es algo que pertenece a la persona con la que se está casado, no a uno mismo. Además lo que define una relación aparentemente es la sexualidad y nada más. Por tanto, la infidelidad solo puede ser sexual. Y por descontado claramente la sexualidad es algo que se entiende como penetración o contacto genital, aunque no esté definido abiertamente. Pero es que además el que no ha tenido sexo con un tercero por supuesto es visto como una víctima a la que se ha humillado, otra muestra más de esa visión de las relaciones como algo basado en la posesión de otra persona y en concreto el cuerpo de la otra persona. Pero curiosamente la víctima puede ser tan imbécil de perdonar la terrible agresión que el otro le ha hecho, y entonces el Estado, que solo quiere dificultar que los divorcios sucedan, no permite que cambies de idea, independientemente de que luego te quieras divorciar. También está basado en la creencia de que tener sexo con un tercero es algo tan negativo que nadie iría diciendo que es así a no ser que haya sucedido. Y que la tercera persona implicada probablemente no querrá ni firmar tal cosa. 

2. Vivir en dos direcciones diferentes no es igual a separarse. Si quieres separarte tienes que solicitar un certificado de separación y para ello tienes que estar de acuerdo con la otra persona en varios puntos, entre ellos cómo repartir los bienes y la posible pensión o manutención. Sin ese acuerdo, aunque vivas en dos direcciones no estás separado porque no tienes el certificado. Después de dos años de torturarte ya deciden dejarte en paz y permitirte divorciarte. Pero antes no, aunque ambos quieran. Lo más curioso es que en el tiempo en el que no te permiten divorciarte si vives con la persona entonces la separación es anulada y no puedes divorciarte. Por supuesto, por descontado que a nadie se le ha ocurrido pensar que haya gente que se quiera divorciar y que pueda mantener una buena relación e incluso seguir compartiendo apartamento.

3. Este punto es directamente escandaloso en todos los sentidos. Aparentemente la violencia leve no es suficiente para que te dejen divorciarte. Si te han dado un bofetón, claro, tampoco hay que exagerar. Si hay violencia psíquica, qué más da. Una visita al hospital y marcas claras en el cuerpo es lo que necesitan, pruebas tangibles de agresión física y, por tanto, seguramente un juicio por agresión. Estupendo.

4. Está claro que en este mundo en el que las relaciones se ven como una posesión de un cuerpo, pero en el que al mismo tiempo las mujeres han accedido a algunos derechos, la bigamia es algo no permitido. Pero ¿quién dice que querer casarse con dos personas es algo que solo hacen los hombres musulmanes que someten a sus mujeres? Quiero decir, además de la clara islamofobia de semejante creencia, también es un problema que se tenga esa fe tan clara en la monogamia y, no solo que no se cuestionen estos principios, sino que se conviertan en ley que tiene que ser válida para todos.

5. Este punto es algo que creo que está directamente hecho en contra de los ciudadanos no daneses. Si dos daneses, uno de Copenhague y otro de Aarhus, se separan y uno se lleva al hijo sin consentimiento a Copenhague a visitar a los abuelos, no pasa nada grave. Sin embargo, si uno de ellos es de Barcelona y se lleva al hijo sin consentimiento a Barcelona a visitar a los abuelos, esto claramente es un problema grave. Pero lo que es peor, si de verdad se trata de secuestro, aparentemente no es algo malo siempre que suceda dentro de Dinamarca, pero si sucede fuera ya es otro tema. Entonces sí es hora de preocuparse... Patético.


En realidad todo esto es clarísimamente un intento de dificultar los divorcios y promover los matrimonios y con ello la idea tradicional de familia, la monogamia, el sexo como lo central en una relación, el cuerpo de la pareja como una posesión y los hijos como un elemento con el que negociar. Además sin duda es una forma de marginar y discriminar a todo el que no participa de este sistema, castigando económicamente al que quiere dejar de ser una familia por medio de comisiones de administración, impuestos y pensiones de manutención, y castigando socialmente al que ha dejado de ser una familia por medio de etiquetas de estado civil con estigma también en esta sociedad. Pero sobre todo obligando a la gente a ver el sexo con terceros como algo inaceptable, la violencia leve como algo no importante, la posibilidad de tener varias parejas estables como algo ridículo o atrasado y el tener una pareja extranjera como un posible factor de riesgo futuro.

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1 comentario:

  1. Buenas
    Perdón por contactarte publicamente. Me gustaría saber si estas interesad@ en el intercambio de enlaces para mejorar la posición en Google.

    Esperi tu respuesta a través de email: davidgm823@gmail.com

    Un saludo

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