29 abril 2010

Le das la mano y se coge hasta el tobillo

Otra cosa en la que los humanos somos iguales, da igual de dónde seamos. A menudo si a alguien le das la mano no le vale con tomar eso, ni siquiera con quedarse con el brazo, se coge hasta el tobillo. Pasa aquí en Dinamarca y pasa en cualquier sitio. Es frustrante y a veces hace que los demás seamos menos amables que lo seríamos.

Ejemplo: quedas con alguien que llega tarde unos minutos el primer día. Se disculpa y tú dices que no pasa nada, que errar es humano y tonterías varias. El segundo día vuelve a llegar tarde, incluso un poco más. Nueva disculpa, nuevo teatro. Pasan los días y la persona va llegando más y más tarde. Las disculpas se hacen menos y menos creíbles y el teatro más y más cansino y poco natural. Llega un punto en el que el buen rollo desaparece y ya no te apetece quedar con la persona porque sabes que eso implica una pérdida de tiempo, una ristra de disculpas inventadas, una dosis de teatro por tu parte y una sensación no muy agradable para el resto de la tarde. 

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3 comentarios:

  1. Tengo un amigo que siempre llega tarde y por eso quedo con él alrededor de 20 minutos antes de llegar yo. ¡Y aún así casi siempre le espero! Lo malo de esto es que muchas veces tiene una motivación ideológica: llegar el último te hace más guay.

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  2. hombre ,si una vez viene tarde se le puede disculpar pero si es una costumbre me parece una falta de respeto porque a mi me queda la duda de que si viene a gusto o forzado y llega un momento que dices "a la mierda,ya esta bien de hacerme perder el tiempo"

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  3. Esa es una de las causas -entre otras- por las que en el pasado he dejao de salir con alguien. No puede ser que una amistad se convierta en una "guerra psicologica".

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