Llevo varias semanas contándole a mi marido acerca de mi intención de hacer este blog y esta mañana, por fin, me he decidido a empezarlo mientras él dormía. Al levantarse me ha preguntado qué había estado haciendo y le he dicho que empezar mi blog y, curiosamente, aunque le he dicho el nombre del blog cuarenta mil veces estas semanas, me ha preguntado cómo se llamaba. Lo más extraño es que al decirle que ya se lo había dicho, él no ha sido capaz de recordarlo. Finalmente he tenido que enseñárselo para que lo recordara. ¿No es raro que si se lo he dicho varias veces no sea capaz de recordarlo?
Es que tu marido no estaba alli, jeje, que ya lo sabemos todos :-D
ResponderEliminarSí, como siempre... ;-)
ResponderEliminar