Dos no están juntes si uno no quiere. Esta afirmación, que en principio suena lógica y que la gente va repitiendo por ahí como una especie de mantra, es una mentira en la sociedad en la que vivimos. Ni siquiera es así si ninguno de les dos lo quieren así. Si te casas, no te puedes separar legalmente sin ir a juicio si uno de les dos se niega a aceptar la separación. Si te quieres divorciar, todavía más. De hecho, a veces no puedes divorciarte ni aunque les dos lo quieran. El Estado, en su obsesión por mantener el sistema patriarcal y someterte a la maldita institución que lo consagra, lucha contra ambos individuos y les obliga a mantener su matrimonio durante como mínimo meses, y a menudo años. El Estado se niega a concederte el divorcio si no vives en otro domicilio. Y te obliga a ir a juicio si tu pareja no quiere divorciarse de ti. El Estado decide al final si hay un motivo para concederte el divorcio, por medio de un juez y una serie de trabas casi infinitas para hacerte desistir en el intento. El Estado te cobra para gestionar tu divorcio, aunque no tu matrimonio (al menos aquí en Dinamarca). Y te obliga a tragarte una charla con un intermediario cuyo objetivo parece ser evitar que te separes y todavía más que te divorcies. Y encima, ese intermediario en este país suele ser un sacerdote cristiano.
Así pues, dos están juntes, al menos legalmente, lo quieran o no lo quieran. Dos están juntes a todos los efectos prácticos con el simple hecho de que uno de les dos se niegue a aceptar que el otro ya no quiere estar en el matrimonio. Me pregunto yo cuánta gente de la que se casa sabrá que esto es así.
Y esto todavía hace más claro que el otro mantra incluso más popular, dos no discuten si uno no quiere, es una mentira mayor. Con que uno quiera seguir discutiendo, te toca continuar hasta que al Estado le de la gana.
ResponderEliminarNo es mi intención ser una talibana ortográfica, pero, en el caso concreto de esta entrada, me surgen varias dudas con respecto al uso de la partícula “e” para designar al género neutro: ¿no deberías escribir “intermediarie” en vez de “intermediario” y “une” o “ningune” en vez de “uno” o “ninguno”? Es decir, ¿no se debería poner una “e” en todas aquellas oes que son susceptibles de ser sustituidas por aes?
ResponderEliminarY más dudas: ¿no se deberían utilizar tildes diacríticas para diferenciar palabras que se escriben igual pero pertenecen a categorías gramaticales diferentes? Me refiero, por ejemplo, al artículo neutro “les” (antes “los”), que se escribe igual que la partícula del complemento indirecto “les” de los verbos transitivos. O al caso concreto de “une” (antes “uno”), que se escribe igual que la tercera persona del singular del presente de indicativo del verbo unir.
Son simples cuestiones que me vienen a la cabeza...
Saludos.
Por cierto, lo de -e i -es se aplicaria al mundo animal? A lo mejor le estoy buscando los tres pies al gate (o a le gate). Bromas aparte, lo de modificar el idioma es bastante más complejo de lo que parece.
ResponderEliminarAh pero.. ¿es que el fin de que dos personas esten juntas es siempre el matrimonio? ¿es que el fin último de una discusión es que el estado gane?
ResponderEliminarEntiendo que con lo que cuentas, cuando dos personas se casan tienen que estudiar detalladamente que no habrá posibilidad de separación hasta la muerte... humm tendré que hablar con varios conocidos para saber cómo han hecho para separarse, divorciarse y volverse a casar después.
Afirmación categórica generalizada que no es cierta....
MrDisfórica, yo tenía las mismas dudas al escribir esta entrada, pero decidí ser consecuente. He hablado de cambiar el plural genérico, no el singular. Ese es un cambio más difícil. Pero que también deseo hacer. Crees que debería hacerlo ya que me pongo? Porque entonces también me pondría con el neutro, entre otros para hablar de mí...
ResponderEliminarKarles, creo que lo del mundo animal sería más bien un neutro que un plural genérico. Y sí, modificar la lengua es difícil, pero tal como está a mí me repatea...
ResponderEliminarAnónimo, el fin es el matrimonio, claro: el fin de tu libertad!!!
ResponderEliminarY un poco más en serio, no, claro que el fin de estar juntes no es el matrimonio. Lo que intento explicar aquí es que cuando te unes en matrimonio aceptas unas reglas que están creadas para mantenerte en el sistema. Y en cuanto a que la afirmación no es cierta, no sé, yo tengo mi dirección oficial en el registro civil con un hombre con el que me he casado y del que no me resulta posible divorciarme a no ser que separemos nuestras viviendas (me mude o se mude durante como mínimo medio año), paguemos al Estado para que tramite la solicitud y este valore que hay motivos para la separación y el divorcio. Si no puedo o no quiero cambiar mi dirección oficial, no es posible divorciarse a no ser que cumplas uno de esos otros requisitos, que tienen que ser valorados por el Estado y que mencionaba en esta entrada.
Lo que le pasa a Lille es que tiene problema con les sexes y por ese usa une neutre. Es que no tiene definida su existencie ni su sexualided. ¡¡Vaya tele!! Lille, estás como une regadere.
ResponderEliminarPD. Es mentira eso de que uno no se puede divorciar si el otro no quiere. Hay millones de personas que van a un juzgado, presentan una demanda de divorcio y no hay que exponer ni causa. En tres-seis meses estarias divorciade aunque tu conyuge no quiera.
A ver, majo mío, primero dejas un mensaje diciendo que la homosexualidad se cura y luego otro diciendo esto. Para qué sigues leyendo el blog? Ganas de ser nominado troll?
ResponderEliminarTe lo deje a tu eleccién.
ResponderEliminarLo de que la homosexualided se cure no lo he dicho yo, pero si lo crees ponte en tratamiente, aunque el cacae mental que tienes que hasta inventas un génere neutre para no tener que definir les coses como masculines o femenines, implica que el tortillerisme es el menor de tus problemes.
PD.: Lo de Trell está muy viste. Ya se usaba en los fores en los que yo participaba hace 10 años. Tendrás que ser más agresive si me quieres poner cachonde
Ahhh, e insiste, el dereche no es le tuye. El divorcie es muy fácil. También pareces tener muuuuuches problemes con le socieded, el estade y les normes, cose habitual en une lesbiane obsesive.
ResponderEliminarDebes de ser muy infeliz y por eso te fuiste a Dinamarca, pero no contabas con que te discriminarían, y eso ha agravado tu situacién.
Sóle tienes una escapatorie, y es este sencille blog.
Tienes razón, en la entrada anterior hablabas del plural genérico. Ha sido un despiste mío. Me ha resultado extraño que no fueras consciente de que no había homogeneidad en el texto, pero ahora entiendo por qué.
ResponderEliminarCreo que lo ideal sería plantear una propuesta integral de evolución del género gramatical en la lengua castellana, aunque el uso del singular sea especialmente complejo.
No me ha dado por investigar, pero probablemente ya existan propuestas realizadas por otras personas con la misma inquietud y, si es así, estaría bien consultarlas, para no empezar desde cero y hacer esfuerzos innecesarios.
Y, sí, yo también utilizaría el neutro para hablar de ti y de cualquier otra persona que no se identificara ni con el género femenino ni con el masculino.
¿Cuál es el lado negativo que puede tener emplear esta variación del lenguaje en tu blog? Pues que a la gente le va a costar entender lo que escribes y a ti te va a te va a resultar difícil escribir, al menos al principio. Además, vas a tener que aguantar a indeseables que te critiquen continuamente por intentar cambiar las cosas.
Aun así, si tienes tiempo y entusiasmo, ánimo... Es una iniciativa necesaria.