Desde hace ya tiempo tengo puesta en mi
Facebook una bandera que me representa a la perfección y que es muy poco conocida, pero sin embargo hasta hoy no he sentido la inspiración para escribir sobre este tema. Se trata del símbolo que identifica a las personas como yo, que sienten
poliamor. Cada vez que hablo de ello me doy cuenta de que la gente no conoce el término, y tampoco está muy abierta a la posibilidad de la existencia de gente como yo, por eso creo que tengo que explicar aquí en lo que consiste.
El poliamor o la poliamoría (ambos términos son utilizados con frecuencia) se puede referir tanto a una relación en concreto como a una filosofía y una forma de vivir las relaciones. Yo me inclino a pensar que si existe la relación poliamorosa es porque sus integrantes tienen, sabiéndolo o de forma menos consciente, una filosofía poliamorosa. Por tanto diría más bien que hay personas poliamorosas, como yo, relaciones poliamorosas, como la que yo creo tener con K, y un movimiento que incluso sin saberlo nos une a los que pensamos así, el poliamor.
Una persona poliamorosa afirma que sentir amor y enamoramiento por una persona no es incompatible con sentir amor y enamoramiento por otras personas. Es decir, que se puede estar enamorado de dos o más personas de forma simultánea. Y se puede amar a muchas personas en el mismo momento. Y por lo tanto, una persona poliamorosa habitualmente deseará tener una relación poliamorosa en la que pueda tener una relación sentimental y sexual (aunque no necesariamente) con varias personas al mismo tiempo. Esta relación seguirá una filosofía poliamorosa en la que lo importante no es la exclusividad de los sentimientos por la persona con la que se tiene una pareja o la exclusividad a la hora de tener sexo con esa persona, sino la sinceridad, la apertura, la confianza de forma profunda, la amistad, la comunicación y negociación, la libertad, el respeto a los sentimientos y deseos de la pareja, la falta de sentimiento de posesión sobre la pareja... Es decir, que lo importante no es lo que tradicionalmente se considera como la esencia de una pareja, fidelidad sexual y amorosa, sino la sinceridad de los sentimientos y actos en un marco de honestidad, respeto, amor y libertad.
La esencia de una relación poliamorosa es que no se considera a la pareja como una propiedad que te pertenece tanto en sentimientos como en cuerpo. La persona con la que estás es libre para sentir y hacer lo que desee con su cuerpo, su corazón o cerebro y su vida. No es tuya, y por tanto no puedes exigirle fidelidad y exclusividad sexual ni amorosa.
Esta esencia se basa en una creencia: las personas no somos monógamas por naturaleza sino por cultura. A todos nos atraen diversas personas y todos podemos sentir distintos amores por personas diferentes de forma simultánea. Por ello, el amor que tu pareja siente por otra persona diferente a ti no hace ningún daño a tu relación, porque eso no significa que tu pareja no sienta amor por ti. Y que tu pareja tenga una relación sexual y amorosa con otra persona no tiene que dificultar tu relación, porque eso no significa que no desee estar contigo, que quiera más a la otra persona o que no se esté tomando en serio sus sentimientos por ti ni su compromiso con tu relación. Por tanto, en lugar de intentar que tu pareja no tenga otras personas o simplemente tolerarlas como "un mal necesario", como persona en una relación poliamorosa consideras que para que tu pareja sea feliz debe estar con esa otra persona a la que ama, y por tanto más que tolerar a la tercera persona la aceptas e integras como una parte importante y significativa de la vida de la persona con la que tienes la relación. De hecho se cree que esa tercera persona puede hacer tu relación más fuerte y más estable, porque la persona con la que estás es más feliz y se enriquece del contacto con otra persona.
Existen multitud de tipos de relaciones poliamorosas. En algunas los miembros tienen relaciones entre ellos. Es decir, por ejemplo tres personas tienen una relación en la que las tres sienten amor y tienen sexo con las otras dos personas. También existen relaciones poliamorosas de grupos cerrados de varias personas. O relaciones en las que dos parejas tienen relaciones entre ellas. Y lo más habitual a mi entender: relaciones en las que cada persona de la pareja es libre para tener a terceras personas de las que están enamoradas y con las que tienen una relación sentimental, sexual o ambas cosas. Es decir, tres personas, en las que dos son pareja con la tercera, pero no entre ellas.
Es importante destacar que el poliamor no es lo mismo que aceptar que la pareja tenga relaciones sexuales sin compromiso. Vamos, el típico "echar un polvo de una noche con un desconocido durante una borrachera". Muy al contrario lo que se acepta aquí es que la pareja tenga una vida importante y significativa, con sentimientos y actos con otra persona diferente. No se trata por tanto de la típica definición de una pareja abierta, aunque muchas personas que definen su relación como una pareja abierta lo que están hablando es de poliamor sin conocer el término. O eso es lo que hacía yo al menos.
En mi caso en concreto hasta hace muy poco tiempo no conocía que existía el término ni que hubiera grupos de gente poliamorosa que se reúnen y hablan del tema. Sin embargo, basándome en mi propia vida y en mi propia experiencia con mis parejas había llegado a la misma conclusión.
Durante años tuve una pareja cerrada en la que no se podía sentir nada por nadie, y menos hacer algo sexual. Eso, no obstante, no evitó que tanto mi pareja de entonces como yo sintiéramos y a veces hiciéramos cosas con otras personas. Evitó sin embargo que diéramos expresión a sentimientos que teníamos por otras personas y eso desde luego a mí me hizo muy infeliz. Ni mi ex ni yo sabíamos lo que la otra hacía, sentía o quería y ambas teníamos mala conciencia por las cosas que nos iban surgiendo fuera de la pareja. Teníamos una relación poco sincera, basada en valores en los que no creía y con los que no me sentía a gusto. Y al final acabó como tenía que acabar. Una de las dos se fue con otra persona.
En mi relación con K las cosas son completamente diferentes. Hablamos de TODO sin tapujos. Y nos damos la libertad para hacer y sentir cosas por otras personas. Desde el principio hemos funcionado así, y creo que nuestra relación es mucho mejor que la que podría tener con cualquier persona que me prometa exclusividad, amor eterno y fidelidad mental y física. Esas promesas lo único que hacen es diezmar la libertad y empobrecer la relación, además de ser puras mentiras. Mi amor por K es mucho mayor y mis ganas de estar con él también lo son sabiendo que soy libre a su lado, sintiendo que me quiere tanto que desea mi felicidad y que ello también incluye que sinceramente se alegre cuando me va bien con otras personas. No me ve como una posesión. Me ve como a una persona. Y esto significa con facetas múltiples, sueños diversos, sentimientos hacia varias personas, deseos variopintos... Una persona que es más feliz si elige estar con él que si promete estar con él da igual lo que pase.
Si alguno de vosotros tiene una relación poliamorosa y desea compartir la experiencia, por favor, dejad un mensaje en los comentarios. Es hora de salir del armario también como personas poliamorosas en relaciones libres de ese yugo social que impone fidelidad sentimental y sexual y lleva a un sinfín de mentiras, sentimientos de culpa e infelicidad.