Obama en Copenhague

Como ya había anunciado, hoy hemos tenido al hombre más poderoso del planeta, Barack Obama, de visita en este país microscópico que es Dinamarca. Por supuesto, no venía aquí a nada que tuviera que ver con nosotros y en realidad es completa y pura casualidad que haya tenido que ser aquí. A lo que ha venido es a apoyar la candidatura de Chicago 2016 para los Juegos Olímpicos. Pero ya que estaba, ha tenido que hacer el paripé y acercarse a hablar con el Primer Ministro danés y la reina.

Su visita, que ha sido vista y no vista, desde luego que se ha dejado notar en la ciudad. Parece que hoy no pasa nada más en el mundo y desde luego que menos en Dinamarca. El avión aterrizó a las 7:50 aunque a él no se le vio hasta las 8:07. Toda Dinamarca, por supuesto, expectante y en completo caos desde las 6 de la mañana porque se creía que iba a llegar una hora antes. El aeropuerto detenido, las calles cortadas, todos los policías cubriendo la ruta por tierra, mar y aire, literalmente. Ya se sabe, el habitual escándalo. Del aeropuerto fue directamente al centro de conferencias, Bella Centeret, donde el congreso de los miembros del COI tiene lugar. El centro de conferencias está en la misma isla, pero incluso así el trayecto y la zona fue completamente cerrada al acceso público. La gente, sin embargo, se agolpa para conseguir ver aunque sea un rincón de la limusina especial en la que viaja. A las 10:21 abandona el centro de conferencias y se dirige al parlamento, Christiansborg. Este edificio se encuentra en el mismísimo centro de la ciudad, así que imaginaos el verdadero caos de tráfico que ha generado. Las calles cortadas desde las 6 de la mañana, la gente esperando en masa, la policía por todas partes... Obama visita a la reina y al Primer Ministro en el parlamento desde las 10:40 hasta las 12:12. Desde el parlamento le llevan otra vez hasta el aeropuerto, donde su avión está esperando. Por el camino no solo se interrumpe el tráfico de toda la ciudad, también se cierra el tráfico entre Suecia y Dinamarca porque el puente pasa al lado del aeropuerto. Obama llega al aeropuerto y en lugar de despegar, tiene un pequeño encuentro secreto con algunos altos cargos militares en su avión mientras todo el país está completamente parado esperando a que se vaya.  Ningún avión aterriza o despega mientras él tiene su reunión. No hay tráfico en el puente a Suecia o en la zona del aeropuerto. Todas las televisiones solo muestran una imagen: el avión con la puerta abierta. Y aquí todos como idiotas esperando a que se vaya... cosa que por fin hace a las 13:12.

¿Y el caso es que todo esto para qué? Como algunos activistas de Greenpeace han marcado con una gran pancarta en la ruta por la que tenía que pasar, Obama está en el sitio adecuado pero en el momento equivocado. Ahora solo viene a promover su ciudad. En diciembre no se sabe si vendrá y aquí tenemos el importantísimo encuentro internacional para hacer el tratado sobre medioambiente que sustituirá al de Kioto. Si EE.UU. no lo apoya, de nada servirá.

Otras consecuencias de la visita de Obama:

• La ciudad de Copenhague ha gastado 5 millones de coronas, 1 por cada hora que ha estado aquí. Dinero mal empleado cuando no se hace más que disminuir las ayudas sociales.
• Todos los policías han sido puestos a trabajar hoy. Eso significa otra vez más que durante meses no tendremos recursos policiales suficientes porque los han gastado todos en este mañana, exactamente igual que pasó la última vez que vino aquí un presidente americano, Bush. Después llamaremos a la policía y nos dirán que no tienen personal suficiente para atendernos si nos están robando, como suele suceder.
• Las otras ciudades han enviado aquí a última hora a sus dirigentes al enterarse de que la super estrella, Obama, venía. Así tenemos a Zapatero, los reyes de España, Lula da Silva y Hatoyama por la ciudad. Eso supone más cortes de tráfico, más caos, más dinero malgastado...

En fin... ¡Qué viva la política sin sentido!