Hoy he tenido una de esas vivencias que un psicoanalista disfrutaría diseccionando. He entrado en mi cuenta de email y tenía varios mensajes. Uno de ellos era de una mujer que lleva medio años tirándome los tejos y con la que no me he visto en un par de meses. Me propone quedar y hacer algo juntas. Después he leído el resto de los mensajes y me he levantado para continuar la charla que tenía con K. Pero sin planearlo de repente me he visto contándole desde el baño que la chica me había propuesto quedar... ¡Desde el baño porque me estaba cortando las uñas! Sin pensarlo de forma consciente está claro que mi cabeza estaba ya haciendo planes de lo que va a suceder en la cita con la mujer :-D
Pero que entrada tan más simpática, me ha fascinado.
ResponderEliminarUnos dedos finos, comparados con los míos.