No sé si os habéis enterado, pero en la ONU estos días se ha estado discutiendo sobre la homosexualidad como parte del 60 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos. Como ya me imagino que sabréis, la homosexualidad no está reconocida como uno de los derechos protegidos por esta famosa y necesaria declaración. Ahora un grupo de países, liderados por Francia y Holanda promueven que se añada la homosexualidad y la transexualidad como derechos fundamentales universales de los humanos. Este grupo está formado por 66 países, y horror de los horrores (o mejor dicho vergüenza de las vergüenzas), no incluye a EE.UU. Como era de temer (porque yo preferiría no tener que esperar cosas así), existe otro grupo que se opone a esta medida, integrado básicamente por países africanos, musulmanes y, cómo no, el Vaticano. Vamos, allí donde la religión tiene más poder...
En todo esto hay varios puntos muy tristes:
Sin duda el primero y más grave es que hoy en día todavía sea un tema a cuestionarse y debatir si los homosexuales debemos tener los mismos derechos que los demás o si es un problema discriminar por la condición sexual. En este mundo en el que hemos llegado a grandes logros después de milenios de barbaridad todavía seguimos aceptando la homofobia como un hecho comprensible. ¿Por qué? Si se lucha contra otras lacras de nuestras sociedades, otros tratamientos injustos y vejatorios, si firmamos y defendemos declaraciones a favor de la no discriminación por el género, la raza, la religión, la discapacidad, la edad... ¿por qué no se entiende que es lo mismo para la orientación sexual? Yo, desde luego, no consigo comprender cómo es posible semejante barbaridad. Hoy todo el mundo se siente provocado y asqueado con razón por esas afirmaciones tan repetidas a lo largo de la historia del estilo: el papel de las mujeres es servir a los hombres, los negros son inferiores a los blancos, los judíos deben ser exterminados, los incapacitados deben ser esterilizados forzosamente, etc. Sin embargo, parece ser que es absolutamente comprensible que la gente escriba y diga barbaridades como: la homosexualidad es una enfermedad, los gays son el cáncer de la sociedad moderna, gays no, etc. O cosas como las que dijo la Reina de España...
El segundo punto triste es que EE.UU., el país más poderoso, se niegue a apoyar la resolución. Sin su apoyo, como toda declaración, pierde fuerza. Sin ellos otros muchos también se niegan a firmar.
El tercer punto criticable es que es una resolución no vinculante. Es decir, no cumplirla no conlleva ninguna penalización. O sea, que ni siquiera los que la firman están obligados a respetarla. Así que imaginad los que no la firman.
Un cuarto punto trágico es que no solo hay países que no suscriben esta declaración (entre ellos algunos grandísimos e importantes como China, India o Rusia), sino que se ha creado un texto paralelo por otros países que directamente están en contra y que ha sido aparentemente firmado por 57 países, pero no he conseguido encontrar una lista.
Como último punto, pero no menos terrible por ello, está la utilización de la religión para mantener penas, castigos y tratamientos injustos. Tanto el Vaticano como los países representantes de otros cultos (especialmente Arabia Saudí) ponen en la práctica un sello de validación a los comportamientos homófobos.
En resumen, un buen intento por parte de algunos países, ¡y ya era hora!, tristemente arruinado por tantos otros.
Os dejo aquí un poco más de información, para los que queráis leer más.
Y aquí un enlace al
vídeo de la sesión de la ONU en la que se lee la resolución y el texto en contra:
http://www.un.org/webcast/ga.html Tenéis que mirar en el día 18 de diciembre de 2008 en la sesión matutina (
Morning Session) en el vídeo en inglés en
2 horas y 25 minutos (la resolución) y
2 horas y 32 minutos (el texto en contra).
Segundo, la lista de países que han firmado la resolución:
- Albania,
- Alemania,
- Andorra,
- Argentina,
- Armenia,
- Australia,
- Austria,
- Bélgica,
- Bolivia,
- Bosnia y Herzegovina,
- Brasil,
- Bulgaria,
- Canadá,
- Cabo Verde,
- Chile,
- Chipre,
- Colombia,
- Croacia,
- Cuba,
- Dinamarca,
- Ecuador,
- Eslovaquia,
- Eslovenia,
- España,
- Estonia,
- Ex-república Yugoslava de Macedonia,
- Finlandia,
- Francia,
- Gabón,
- Grecia,
- Georgia,
- Guinea-Bissau,
- Holanda,
- Hungría,
- Irlanda,
- Islandia,
- Israel,
- Italia,
- Japón,
- Letonia,
- Liechtenstein,
- Lituania,
- Luxemburgo,
- Malta,
- Mauricio,
- México,
- Montenegro,
- Nepal,
- Nueva Zelanda,
- Nicaragua,
- Noruega,
- Paraguay,
- Polonia,
- Portugal,
- Reino Unido,
- República Centroafricana,
- República Checa,
- Rumanía,
- San Marino,
- Santo Tome y Príncipe,
- Serbia,
- Suecia,
- Suiza,
- Timor Oriental,
- Uruguay,
- Venezuela.
Y aquí una colección de enlaces para que podáis consultar la noticia en varias versiones:
Una racional y corta en inglés, de BBC:
Otra en inglés, de The New York Times:
La homófoba declarada aunque bajo un intento de ser escondida de La Razón:
La anti vaticana de El País:
La activista de la Comisión Internacional de los Derechos Humanos para Gays y Lesbianas:
La de la prensa rosa en inglés de The Pink News: