Después de unos días en Alemania de turismo viendo varias ciudades, siendo esta la sexta vez que visito el país, no puedo dejar de notar que sinceramente, si pudiera elegir fácilmente y sin complicaciones, preferiría vivir en Alemania que en Dinamarca... o que en Suecia como soñaba antes.
La parte negativa y que no me gusta de Alemania es que por las noches las ciudades se vuelven muy duras y da bastante mal rollo pasearse según las zonas. Sin embargo, si lo piensas, en Dinamarca las noches también son un rollo, todo está cerrado y vacío, y aunque no sea tal vez tan peligroso, tampoco da mucha alegría pasearse por calles desiertas, oscuras y frías. En ambos lugares parece que es mejor volver a casa por la noche. ¡Pero eso parece algo general en el mundo, casi es España la excepción más que la regla!
En cuanto a lo positivo, hay mucho. Para empezar, el clima parece mejor. También el idioma me gusta más. Las ciudades son más grandes y, las que no lo son, todavía parecen más una ciudad que las de Dinamarca, que suelen parecer pueblos. La gente es mucho más sociable. Son unos comilones y hay restaurantes y lugares para comer fuera por todas partes, no como aquí. Los precios son mucho más bajos que aquí y sin embargo no creo que su salario sea mucho peor, si pensamos en lo que ganan y ganamos después de los impuestos. Hay vida por las calles. Son consumistas como los españoles, les gusta disfrutar. Hay mezcla cultural que parece más integrada y aceptada. Y muchas más cosas.
Eso sí, su música a veces es una pena :-D
Ojalá que hubiera un puente desde aquí y no tuviéramos que pagar esos ferries daneses tan caros para cruzar o dar un rodeo enorme por Jutlandia para llegar. Iríamos mucho más a menudo.
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