Estábamos el otro día tomando algo con unos de mis amigos y surgió este tema tan bonito que ya he tenido que aguantar de la boca de otros de mis amigos antes: esa tontería estilo PP que dice que los homosexuales no deberían poder casarse, ser pareja de hecho sí, pero casarse no. Me dicen, como dice el PP, que es un problema lingüístico y no de homofobia y eso todavía me molesta más.
Pero vamos a ver, si en el fondo están de verdad de acuerdo con que los homosexuales tienen que tener derecho a tener su pareja reconocida, ¿por qué no llamarlo matrimonio? Debe ser para diferenciar a "los de verdad" con esos otros que no sé yo de qué son sino de verdad. Y si no se trata de quitar derechos a nadie, ¿por qué llamarlo de otro modo? Si casarse y ser pareja de hecho es exactamente lo mismo, ¿por qué no se deberían poder casar si sí que deben poder ser pareja de hecho? Y si no es lo mismo, ¿por qué beneficiar a las uniones de los heterosexuales frente a las de los homosexuales?
Vamos, que a mí me parece que deben decir las cosas como son y llamar a lo que sienten por su nombre: homofobia. La base de todo está en que no creen que una pareja homosexual tenga que tener los mismos derechos y privilegios que una pareja heterosexual. Entonces, para no caer en eso que ahora parece que sienten vergüenza en reconocer, la homofobia abierta, dicen que "sí, que está muy bien que formen uniones y tengan derechos, pero que no se le llame lo que no es, un matrimonio".
Curiosamente, y ya como coletilla, luego hablando de otro tema estos mismos amigos me comentan que casarse tiene beneficios fiscales y, en el tema de las herencias, ventajas que no tienen las parejas de hecho. O sea, que saben que no es lo mismo ser pareja de hecho que estar casado y lo que quieren, en consecuencia, es que no tengamos los mismos derechos.